En América del Norte, el estudiante de consultoría o psicología clínica generalmente encuentra lo que se convierte en su orientación teórica, mediante la cual conceptualiza sus casos a través del proceso de lectura de varios sistemas teóricos de psicoterapia. Aunque el análisis existencial como enfoque psicoterapéutico existe desde hace casi un siglo, sólo se ha elaborado como una teoría sistematizada desde la década de 1980; con la mayoría de los recursos disponibles solo en traducciones alemanas. Desde entonces, se han realizado muchos esfuerzos para que los recursos estén disponibles en inglés y en español. Con esto en mente, el objetivo de este artículo es aprovechar los recursos ya existentes y proporcionar una síntesis teórica concisa para los consultores clínicos haciendo énfasis en los antecedentes teóricos, la teoría de la personalidad, la teoría de la psicopatología y la teoría del cambio.
Antecedentes Teóricos
Una definición científica del análisis existencial lo describe como una psicoterapia fenomenológica y orientada a la persona con el objetivo de: habilitar a una persona en la vivencia libre de su vida a nivel espiritual y emocional; llegar a decisiones auténticas; y llegar a una forma responsable de tratar consigo mismo y el mundo que los rodea (Längle, 2019). Viktor Frankl (1905-1997), quien estableció el análisis existencial, fue un neurólogo y psiquiatra austriaco que es ampliamente reconocido por su libro El Hombre en Búsqueda del Sentido (1946), que narra sus experiencias como prisionero en los campos de concentración nazis durante la Segunda Guerra Mundial y describe su método psicoterapéutico, la Logoterapia. Como respuesta a lo que Frankl percibió como psicologismo reduccionista encontrado en el psicoanálisis (psicología profunda), Frankl concibió el análisis existencial como una teoría antropológica que agregaba la dimensión noética (humano-espiritual) como una tercera dimensión a la antropología bidimensional de Freud y Adler, el cuerpo y la psique. Frankl “quería que la psicoterapia tuviera en cuenta la dimensión espiritual humana en la teoría y en la práctica” (Kirchbach, 2003) al incluir una dimensión con cualidades que creía que eran exclusivas de los humanos, tales como: la capacidad de libertad, la responsabilidad y la búsqueda del sentido; que Frankl consideraba la mayor de todas las motivaciones humanas. En 1983, Viktor Frank entró en estrecha colaboración con Alfried Längle (n. 1951), psicoterapeuta y médico, para desarrollar el análisis existencial y la logoterapia. Desde la participación de Längle, la antropología tridimensional de Frankl ha sido conceptualizada de manera más sistemática y transformada en una base sólida (Kirchbach, 2003).
Como método principal para comprender la naturaleza noética de la persona, el análisis existencial utiliza una actitud fenomenológica que enfatiza la vivencia libre del cliente momento a momento; con el propósito de permitir el diálogo con el fenómeno de la vida. Además, la vida se considera dinámica, más que un estado fijo y estático. Por esta razón, el análisis existencial también emplea una actitud dialógica para reconocer que una persona debe estar en constante diálogo con las condiciones y preguntas que la vida les plantea. A través de la apertura al diálogo y la experiencia auténtica de la vida, la responsabilidad de una persona es encontrar su respuesta única a las condiciones de vida.
Teoría de la Personalidad
Todo ser humano está motivado física, psíquica y noéticamente por cuatro motivaciones existenciales; la motivación es la orientación activa hacia un valor. Estas condiciones se entienden como las cuatro Motivaciones Fundamentales (MFs). Estas motivaciones plantean preguntas sobre la capacidad de uno para estar en el mundo (1ª MF: Estoy aquí. ¿Puedo ser?); encontrar la existencia como valiosa (2ª MF: estoy vivo. ¿Me gusta este hecho?); ser uno mismo (3ª MF: soy yo mismo. ¿Se me permite ser yo mismo?); y para encontrar sentido y propósito (4ª MF: Estoy aquí. ¿Para qué propósito ?). Para encontrar la respuesta única a las condiciones de vida, uno necesita descubrir su posición interior. Esto ocurre al conectarnos con las partes más profundas de nosotros mismos y conciliar nuestros sentimientos más profundos con nuestras intenciones. Cuando uno es capaz de descubrir verdadera y auténticamente su posición interna hacia las condiciones de vida, puede dar su consentimiento interno o una afirmación interna (un “sí” hacia la vida) y puede involucrarse con el mundo, con ellos mismos y con otros de una manera satisfactoria (Längle, 2019).
Nuestra respuesta con consentimiento interno a cada una de las MF requiere cumplir requisitos específicos. 1ª MF (“Estoy aquí, ¿puedo ser?”) Requiere protección, espacio y sostén. 2ª MF (“Estoy vivo, ¿me gusta esto?”) Requiere relación, tiempo y cercanía. 3ª MF (“Soy yo mismo, ¿puedo ser yo mismo?”) Requiere justicia, aprecio y consideración. 4ª MF (“Estoy aquí, ¿con qué propósito?”) Requiere un campo de actividad, un contexto estructural y un valor a realizarse en el futuro. Cuando una persona siente que tiene estos requisitos cumplidos adecuadamente, se siente capaz de dar su sí único a estas condiciones y puede vivir una vida plena.
Teoría de la Psicopatología
Cuando uno no puede dar su consentimiento interno en respuesta a cada MF, se puede sentir una sensación de incongruencia y se responderá haciendo frente o tratando de lidiar efectivamente con lo que es difícil. El patrón básico de estas reacciones de coping en las cuatro MF son: 1) Movimiento basal (comportamiento de evitación): minimizar la pérdida; 2) Movimiento paradójico: activismo; 3) El mecanismo de defensa más fuerte: agresión específica; y 4) Ganar tiempo: Fingiendo el reflejo de muerte (Längle, 2019). Las reacciones de coping específicas en cada MF son:
• 1ª FM: 1) evasión o huida; 2) hiperactividad o comportamiento compulsivo; 3) agresión u odio; y 4) miedo y ansiedad (Längle, 2005).
• 2ª FM: 1) regresión; 2) sobreprotección o sobre-logro; 3) furia o ira; y 4) resignación, apatía y depresión (Längle, 2005).
• 3ª FM: 1) distanciarse; 2) insistencia terca que resulta en una vida hiper funcional; 3) molestia, enojo y reproche; y 4) disociación de la cognición y la emoción, que puede resultar en un trastorno de la personalidad (Längle, 2005).
• 4ª FM: 1) actitud desorganizada, cotidiana hacia la vida; 2) idealización y fanatismo; 3) indignación, juegos agresivos y cinismo; y 4) nihilismo, parálisis interna y adicción (Längle, 2005).
Cuando estas reacciones de coping no pueden ayudar a resolver las tensiones psicodinámicas, ocurre la psicopatología. Los trastornos mentales se entienden como una fijación en el comportamiento, donde el diálogo se vuelve fijo o inhibido. Hay cuatro tipos de diálogo fijo de acuerdo a las cuatro MF que crean perturbaciones en uno: conciencia (1ª MF), a través de dificultades en la percepción de la realidad; vivencia (2ª MF), a través de dificultades en las relaciones, agotamiento de valores, vacío interno, afecto plano y empobrecimiento de la relación consigo mismo ; posicionamiento (3ª MF), a través de dificultades en la comprensión de las relaciones importantes de la vida, el desarrollo de opiniones, actitudes y posiciones y en la toma de decisiones; y comportamiento (4ª FM), a través de dificultades en llevar a cabo su propia voluntad, actitudes y convicciones (Längle, 2019).
Teoría del Cambio
Un problema es un obstáculo que se interpone en el camino del flujo de la vida y esta acompañado de un sentimiento desagradable. Si el problema se siente demasiado difícil de manejar por su cuenta, pueden buscar ayuda. Ayudar, significa comprometerse o invertir en uno mismo para hacer posible algo que el otro no es capaz de hacer en ese momento (Längle, 2019). Se pueden encontrar componentes de ayuda real en las cuatro MF: estar allí, presente, invertir en uno mismo y permitir que el otro esté más presente (1ª MF); aportar calidez y bondad, valor y asumir una relación de calidad (2ª MF); respetar la autonomía, dignidad y respeto del otro limitando la ayuda brindada (3ª MF); y sentir lo significativo y bueno de ambos lados porque ayuda a cumplir un objetivo que lo libera de dificultades o angustias (4ª MF) (Längle, 2019). Una persona que ayuda de modo profesional puede soportar la impotencia y el sufrimiento, satisface sus propias necesidades interpersonales en otros lugares, no trata de resolver la culpa a través de la ayuda, puede separarse del cliente, puede controlar los impulsos y reacciones de ayuda, y pide ayuda cuando es necesario (Längle, 2019 ) Las condiciones de vida son tercas, más que cualquier cliente. Para recibir ayuda, un cliente debe tener un cierto grado de humildad para enfrentar las condiciones de vida y estar abierto a la ayuda ofrecida. Además, el profesional debe ayudar al cliente con su capacidad de tener una vivencia libre, lo que le permite explorar sus experiencias libremente y tener una capacidad de diálogo.
Intervenciones Clave
Si bien los problemas se pueden experimentar de forma somática, psíquica y noética, el punto de acceso del terapeuta se encuentra en la dimensión noética a través de lo que se denomina Análisis Existencial Personal (AEP). El AEP trabaja ayudando al cliente a explorar su respuesta auténtica a la vida mediante el desarrollo de la capacidad de encontrar su posición interna; desde donde pueden dar un consentimiento interno a la vida. El proceso del AEP tiene 4 etapas: 1) información, 2) impresión, 3) posición y 4) expresión. Primero, la etapa de información evalúa una descripción narrativa de lo que realmente le sucede a la persona. En segundo lugar, la etapa de impresión inicia el proceso de comprensión del impacto de la experiencia que tiene el individuo a través de una actitud empática y un análisis fenomenológico. Tercero, la etapa de posicionamiento reúne lo que el cliente hace de la experiencia y cómo la comprende. Finalmente, la etapa de expresión hace la pregunta, “¿Qué quieres hacer?” Aquí el cliente expresa su posición interna a través de la acción hacia su situación (Kwee & Längle, 2013).
Bibliografía
Kirchbach, G. v. (2003). General Introduction to Logotherapy and Existential Analysis. European Psychotherapy, 4(1), 33-46.
Kwee, J., & Längle, A. (2013). PHENOMENOLOGY IN PSYCHOTHERAPEUTIC PRAXIS: AN INTRODUCTION TO PERSONAL EXISTENTIAL ANALYSIS. EPIS Journal of Psychoanalysis, Phenomenology, & Critical Theory.
Längle, A. (2005). The Search for Meaning in Life and the Existential Fundamental Motivations. Existential Analysis: Journal of the Society for Existential Analysis, 16(1), 2-14.
Längle, A. (2019). Coping Reactions: Coping Reactions Across the 4 FMs. (J. Kwee, D. Klaassen, & M. Launeanu, Performers) Langley, BC.
Längle, A. (2019). Fulfillment and meaning in life: An introduction to existential analysis. (M. Launeanu, D. Klaassen, & J. Kwee, Performers) Langley.